Playas de Madrid
Playas de Madrid

Cinco playas de Madrid

Vale, en Madrid no tenemos playa, pero tenemos unas piscinas naturales, pantanos y ríos que son igual de refrescantes y sin la molesta arena.

‘Aquí no hay playa’ es una canción de The Refrescos que se creó para dejar claro que en Madrid, por mucha capital de país que sea, nos falta un elemento fundamental para ser una ciudad completa: la playa. Es cierto que el mar no llega hasta nuestra provincia, pero ni falta que hace. En la región tenemos piscinas naturales con agua pura del deshielo de las montañas, pantanos en los que practicar deportes acuáticos y ríos y lagos con un césped tan verde que nada tiene que envidiar a la molesta arena de la costa. Además de las piscinas de verano que nos refrescan sin tener que salir del centro de la ciudad y las que se encuentran a ras de cielo en azoteas y hoteles. Para demostrar que no tenemos nada que envidiar al Levante, os hemos preparado una lista con las cinco mejores playas de Madrid.

 

 

 

 

Piscinas naturales de Las Dehesas
Piscinas naturales de Las Dehesas

 

 

En Cercedilla se encuentra uno de los lugares más frecuentado por los madrileños en la época veraniega. En el propio Valle de Fuenfría encontramos las piscinas, que en realidad son pequeñas pozas situadas en el transcurso del Arroyo de la Venta. Fueron creadas en el año 1978 y aunque ahora su agua está tratada con cloro, al principio eran totalmente naturales. El complejo recreativo de Las Berceas cuenta también con un bar merendero, zonas de césped, baños, vestuarios y una enfermería. Abre hasta finales de agosto de 10 a 20 h y la entrada cuesta 6 € los días laborables y 7 € los sábados, domingos y festivos. Los niños menores de 14 años y los mayores de 65 pagan 4 €.

 

Las presillas de Rascafría
Las presillas de Rascafría

En el Valle del Paular se encuentran las piscinas naturales de Rascafría. Su agua es tan cristalina que se puede contemplar el fondo sin ninguna dificultad, aunque es difícil aguantar mucho tiempo dentro de ella porque está muy fría. La zona está dividida en tres piscinas ubicadas en el cauce del río Lozoya, con amplias praderas verdes que se llenan de familias y grupos de amigos cada verano. La entrada es libre y gratuita y el precio del aparcamiento es de 9 € por coche y día. Abre todos los días durante los meses de verano de 10 a 21 h y tiene mesas, kioscos, aseos y papeleras. Una gran opción para disfrutar de un baño en plena naturaleza. No os perdáis tampoco su cercana Isla.

 

 

El pantano de San Juan
El pantano de San Juan

 

Un clásico en el veraneo madrileño. ¡Y además estrena Bandera Azul! Pocos son los padres y abuelos que no han llevado a su familia hasta aquí y se han refrescado en este pantano, situado entre San Martín de Valdeiglesias, El Tiemblo, Cebreros y Pelayos de la Presa. Con 14 kilómetros de playas, es el único embalse de Madrid donde está permitido el baño. Las zonas para practicar deportes acuáticos están bien delimitadas y separadas de los bañistas. Es importante seguir las recomendaciones de seguridad, ya que se pueden alcanzar los 70 metros de profundidad en algunas zonas del pantano. La afluencia suele ser masiva y los fines de semana entre junio y septiembre más te vale ir pronto o no encontrarás sitio para plantar tu toalla.

 

 

Piscina natural de Riosequillo
Piscina natural de Riosequillo

En Buitrago de Lozoya encontramos una de las piscinas naturales más grandes de todo Madrid. El agua le llega directamente del Embalse de Riosequillo. La piscina natural tiene cerca de 4.500 metros cuadrados y a pesar de que su agua está tratada con cloro sigue estando igual de fría que la del río. El complejo cuenta además con zonas de descanso y merendero, baños, vestuario, un chiringuito, pista de fútbol sala y baloncesto y un área de juegos infantiles. Abre desde mediados de junio hasta finales de agosto de martes a domingo de 11 a 20 h. La entrada cuesta 5 € los adultos en fin de semana (4 € días laborables) y 3 € y 3,50, respectivamente, los niños y mayores de 65.

 

 

El embalse de Picadas
El embalse de Picadas

 

Otro remanso de paz natural para darse un baño refrescante en verano. Con una superficie de 92 hectáreas, este embalse está situado en San Martín de Valdeiglesias, aunque la presa que forma este embalse está próxima a Aldea del Fresno. Sus aguas provienen del río Alberche, que por cierto alberga muchas pequeñas playas a lo largo de su cauce. Alrededor hay un extenso bosque de pinos y cuenta además con una zona recreativa (La Depuradora) con barbacoas (prohibidas en los meses de verano, eso sí), mesas para comer, etc. También se puede practicar la pesca en algunas zonas.